viernes, 15 de mayo de 2020

La empatía.

Es irónico que la gente se entienda hablando, cuando no sabemos hablar. No lo digo en el sentido literal de la palabra. Todos lo único que vemos son nuestros propios intereses, sin importar que para concretarlos dañemos en el camino a personas que estimamos. No miramos lo colectivo, no practicamos la empatía, tal vez ni seamos dueños de nuestras vidas. Cuando digo empatía lo digo en forma diferente, ví definiciones que para mí no significan ser empático. Bueno, para mí es poder comprender a la persona, ponerse en su lugar pero no para sentir lo mismo, porque todos somos diferentes y podemos sentir esa experiencia en diversas formas. Lo que uno puede sufrir, otra persona no, o ser más tolerante, incide según en qué etapa de la vida estemos, cómo nos formó, qué visión le pudimos dar a nuestros problemas. Una de las razones del desarrollo como ser humano es poder cambiar y avanzar, no superarse sino poder entender a las personas. Por ejemplo para mí es muy difícil comprender los puntos de vista de cada uno. Más allá de poder entenderlos, no los comprendo; siempre me sorprendo cuando conozco gente nueva, y es bueno hacer un bien a los demás aunque no siempre estemos del lado que quisiéramos.